MATICO – Guardián herbal de la piel, la sangre y la memoria

Nombre botánico: Buddleja globosa

Origen: Zonas templadas y húmedas de Sudamérica, especialmente Chile y Perú

Parte utilizada: Hojas deshidratadas y prepicadas

Sabor: Amargo suave con un dejo herbal fresco

Aroma: Verde, balsámico y ligeramente resinoso

Cafeína: No contiene

El matico es una de las hierbas más valoradas por la medicina herbolaria sudamericana, conocida desde tiempos precolombinos como “la hierba de los soldados”, por su capacidad de sanar heridas, detener hemorragias y regenerar los tejidos. Su hoja, de forma lanceolada y textura rugosa, guarda un carácter robusto que al infusionarse se transforma en una medicina noble y reconfortante.

Espiritualmente, el matico se relaciona con la capacidad de proteger y cerrar lo que está abierto: ya sea un corte, una herida emocional o una fuga energética. Es una planta que resguarda, que cuida sin ser invasiva, como un guardián silencioso que limpia y fortalece. Su amargor sutil nos habla de purificación, de la necesidad de soltar toxinas físicas y simbólicas para restablecer el equilibrio.

En la infusión, el matico se manifiesta con firmeza pero sin dureza, acompañando procesos de sanación profunda y otorgando claridad en momentos de dispersión, cansancio o trauma físico y emocional. Es la hoja del cuidado consciente, del retorno al cuerpo, de la presencia compasiva.

Propiedades mágicas y funcionales: 

Cicatrizante y regenerativo: Ideal para tratamientos internos y externos relacionados con heridas, úlceras o irritaciones.

Antiinflamatorio y analgésico: Ayuda a aliviar dolores musculares, articulares y problemas digestivos.

Digestivo y protector gástrico: Suaviza inflamaciones internas, favoreciendo la regeneración de la mucosa gástrica.

Purificador energético: Protege el campo áurico y detiene «fugas» energéticas.

Planta de cierre: Usada ritualmente para terminar procesos, cerrar ciclos y sellar heridas emocionales.

Energía y simbolismo

Elemento: Tierra – Agua

Chakra asociado: Plexo solar y corazón

Vibración mágica: Cierre, protección, autocuidado

Ideal para rituales de: Sanación energética, cierre de ciclos, autocuración emocional, fortalecimiento de límites personales

¿Cómo se siente en una infusión?

La infusión de matico es dorada, con matices verdosos y un perfume herbal balsámico. En boca, se presenta ligeramente amarga pero suave, envolviendo con una sensación de limpieza y contención. Reconforta el estómago, la piel desde adentro y los límites energéticos, como una capa cálida que abraza.

En tus blends de Hechiza-Té, es ideal para:

Mezclas digestivas que incluyan manzanilla, regaliz o boldo.

Blends de protección energética y limpieza espiritual con ruda, salvia o romero.

Infusiones reparadoras para después de enfermedades o procesos médicos.

Tisanas femeninas para úlceras, inflamaciones o irritaciones del aparato reproductor.

Blends para sanar heridas emocionales, junto a melisa, lavanda o rosas.

Usos más allá de la infusión:

Baños de tina o de pies: Para cerrar campos energéticos, purificar el cuerpo o aliviar dolores.

Compresas herbales: Sobre heridas, quemaduras o zonas inflamadas.

Tinturas herbales: Como antihemorrágico y cicatrizante natural.

Sahumerios o inciensos protectores: Para sellar espacios, cerrar rituales o proteger el hogar.

Ungüentos caseros o cremas: Para regenerar piel dañada o sensible.

Amuletos herbales: Como símbolo de protección, cuidado personal y claridad.

Ingredientes:

Hojas deshidratadas de matico (Buddleja globosa)

Preparación:

Temperatura del agua: 90°C

Tiempo de infusión: 7 a 10 minutos

Cantidad recomendada: 1 cucharadita colmada (aprox. 1,5 g) por taza

Extra: También puede utilizarse en infusión doble para compresas externas o en forma de macerado para baños energéticos.

Presentación:

Vidrio 60 gr

Refill 60 gr

Vidrio 20 gr